Llegó la ahora de ajustar cuentas.
Ese fue el mensaje que el relevista de los Dodgers de Los Angeles, Joe Kelly, le envió a los Houston Astros cuando realizó dos lanzamientos en zona peligrosa a Alex Bergman y Carlos Correa que le costaron una suspensión de ocho partidos por parte de las Grandes Ligas y levantó la voz de protesta entre otros lanzadores.
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Si bien es cierto que la temporada de béisbol se está jugando bajo unas circustancias inusuales, era de esperarse que tarde o temprano iba a suceder un incidente de esta índole debido al escándalo del robo de señales en la campaña del 2017 cuando los Astros quedaron campeones de la Serie Mundial.
Ningún pelotero de la novena texana fue sancionado por el escándalo al recibir inmunidad por parte del comisionado Rob Manfred, pero muchos peloteros, equipos, fanáticos y periodistas, incluyéndome- quedaron inconformes con la determinación.
Para muchos la “justicia” tendría que llegar por otra vía al estilo del béisbol, a pelotazo limpio, y más aún por el hecho que a causa de la pandemia del coronavirus los estadios están vacíos lo que imposibilita a los fanáticos descargar su furia contra los Astros.
3-0 pitch from Joe Kelly ends up going behind Alex Bregman. pic.twitter.com/q6P8CD5oqj
— FOX Sports: MLB (@MLBONFOX) July 29, 2020
De ningún modo estoy apoyando el gesto de Kelly. Una recta lanzada a 100 millas a la cabeza de manera intencional es muy peligrosa y raya en un asesinato si llega a pegarle, pero a través de la historia así es que se ajustan cuentas en el diamante. Recibes el pelotazo y caminas adolorido a primera base o corres al montículo para intercambiar golpes y empujones junto a tus compañeros en el dugout.
Esto seguirá así hasta que un día –esperamos que nunca llegue a esto– un pelotero reciba un rectazo intencional y quede en estado vegetativo o muera. Hay modo de propinar bolazos adrede sin mayores consecuencias, pero siempre habrán lanzadores con los cascos de Kelly que lo llevarán a otro nivel.
“Sabíamos antes del juego que gusta salirse del libreto. Es lo que es. Sus acciones demuestran lo que es. Lo que hizo después de retirar a Correa no fue profesional. Así que es lo que es. Estamos aquí para jugar béisbol. Solo queremos ganar. Eso es todo”, indicó el miércoles el lanzador de los Astros, Lance McCullers, en entrevista con los medios de comunicación.
Ahora bien, ¿estuvo bien una suspensión de ocho partidos a Kelly?
En una temporada corta de 60 encuentros, la sanción significa que el relevista derecho perderá el 13 porciento de los encuentros y eso puede marcar diferencias, por eso muchos consideran que fue muy severa ya que la misma equivale a 22 juegos en una campaña normal.
En los últimos años un incidente parecido significaba una sanción muy parecida. No considero que debería hacerse algun “ajuste” proporcional dado a las circunstancias. Si Kelly tuvo los pantalones -por no decir otra cosa- para realizar esos lanzamientos y actuar como un payaso luego de ponchar a Correa lo que casi desata una bronca, pues ahora le toca aceptar las consecuencias.
Carlos Correa has to duck out of the way from an inside breaking ball from Joe Kelly. pic.twitter.com/NabNOVB0Q6
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Carlos Correa and Joe Kelly exchanged words after Kelly struck out Correa. Benches cleared following the exchange. pic.twitter.com/sVHaibpN2y
— FOX Sports: MLB (@MLBONFOX) July 29, 2020
El relevista que ni siquiera estuvo con los Dodgers cuando perdieron la Serie Mundial del 2017 ante los Astros, bromeó que no tenía su mejor control cuando le lanzó una recta a la cabeza de Bergmen en conteo de 3-0. A otro perro con ese hueso.
“No fue mi mejor lanzamiento. Fue la cuarta bola. Lo caminé. Nunca es bueno darle la base a alguien cuando está en ventaja. No estaba lanzando bien, no estaba cómodo. Me tomó un tiempo encontrar mi mécanica”, dijo Kelly sacando así una página del libreto de excusas de todo lanzador en una situación como ésta.
Dave Roberts, manager de los Dodgers, que fue suspendido por un encuentro, fue más honesto al decir que “esto es algo que se ha desarrollado en el transcurso de siete meses. Creo que fue desafortunado, pero para darle otro giro, creo que es bueno que lo hayamos sacado del camino, nadie resultó herido y podemos seguir adelante y jugar béisbol”.
En algunos círculos, y no es una sorpresa, Kelly recibió muestras de apoyo por su gesto justiciero. El tirador derecho Marcus Stroman, de los New York Mets, respondió a un tuit del periodista Ken Rosenthal, del Athletic, que consideró la sanción muy severa.
“Tiene cero sentido Ken. Ni siquiera fue expulsado del juego. MLB apoyando / protegiendo a un equipo que abiertamente y conscientemente hizo trampa para ganar una Serie Mundial. No merece ser suspendido en absoluto. Espero que gane su apelación. ¡Espero verte de nuevo por ahí JK!”.
El lanzador de los Cleveland Indians, Mike Clevinger, también no estuvo de acuerdo con la suspensión.
“No puedo creer que demonios está pasando en MLB ahora mismo… Estoy tan perdido como ustedes en sus casas”, dijo Clevinger, quien le respondió a otro periodista Jon Heyman, quien dijo que la suspensión estuvo bien. “¿Y qué se merecen los Astros Jon? ¿Ser soplones y caminar libres y todavía estar confundidos de por qué todo el mundo está molesto?”.
Esta polémica de los Astros realmente pica y se extiende, y no creo que hayamos visto el último incidente en esta saga. El problema es que siempre quedará una espina por lo sucedido en el 2017 por más que se trate de pasar la página.