Durante un evento denominado ManUp Pittsburgh, a través de una participación virtual, el quarterback estrella de los Pittsburgh Steelers reveló la feroz lucha que enfrentó para vencer su adicción al alcohol y a la pornografía, vicios que en un par de ocasiones lo llevaron a ser acusado de violencia sexual e incluso en 2010 le significaron una suspensión de seis partidos por conducta inapropiada en la NFL.
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“La gente no se da cuenta que nosotros, los atletas, somos humanos; cometemos pecados como cualquiera. Yo no soy diferente, he fallado como cualquiera, he sido adicto al alcohol, a la pornografía, lo que no me convierte en el mejor esposo, tampoco en el mejor padre, ni en el mejor cristiano posible”, señaló el ganador de dos Super Bowl y nominado en seis ocasiones para el Pro Bowl,
El “Big Ben” aseguró que en los momentos más oscuros de su vida sólo la gracia de Dios le ayudó a salir a flote.
“Uno debe dedicarse a sí mismo y comprender que puedes salir de eso por la gracia de Dios cuando dice, ‘Escucha, eres lo suficientemente bueno para mí por cómo eres. No tienes que ser perfecto”, indicó.
Desde hace tres años Ben Roethlisberger decidió convertirse en cristiano y recurrentemente trata de ayudar a los miembros de su congregación.
