El tiempo se le vino encima al millonario ruso Roman Abramovich, quien tenía planeado vender al Club Chelsea antes de que le congelaran sus bienes y cuentas en el Reino Unido, nación donde pretenden ahorcarlo financieramente.
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De manera lapidaria, el gobierno encabezado por el primer ministro Boris Johnson dio a conocer que debido a la estrecha relación existente entre el magnate y el presidente ruso Vladímir Putin, todas sus cuentas y bienes le fueron congelados hasta nuevo aviso por lo cual se encuentra inhabilitado para realizar operaciones de compra-venta.
Following the UK Government’s announcement that sanctions have been imposed against Roman Abramovich, the Premier League can confirm tonight’s match between @NorwichCityFC and @ChelseaFC will go ahead as planned
Full statement: https://t.co/xKVGAoeD7C pic.twitter.com/d5v9HbRFFy
— Premier League (@premierleague) March 10, 2022
Así las cosas, la oferta de 2 mil 895 millones de dólares que Todd Boehly, copropietario de equipos Los Angeles Dodgers, que había puesto en la mesa y otras más para adquirir al conjunto inglés deberán esperar hasta que las autoridades determinen cuándo podrá cambiar de manos.
Por el momento, al Chelsea le fue otorgada una “licencia especial” para seguir operando bajo estrictas restricciones como son la imposibilidad de vender entradas para sus partidos en Stamford Bridge, a los cuales únicamente tendrán acceso los aficionados que hayan adquirido sus abonos anticipadamente, los cuales se estima rondan en 28 mil.
Asimismo, también quedarán cerradas las tiendas del club y tampoco se podrá vender ningún artículo relacionado con los “Blues” como son las camisetas. Sin embargo, lo más complicado es la imposibilidad de transferir o adquirir jugadores.
Cabe señalar que los gastos relacionados con el Club, como son los salarios de los trabajadores y del plantel, serán cubiertos con un porcentaje proporcional de los ingresos generados por la venta de las transmisiones televisivas de sus partidos.