A sus 38 años, el veterano quarterback de 38 años, originario de Chico, California, está cerca de convertirse en el jugador con el mejor salario en la historia del fútbol americano profesional.
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Una fuente cercana a los Green Bay Packers y que prefiere mantenerse en el anonimato, le dio a conocer a ESPN, que directivos del equipo y Aaron Rodgers están cerca de cerrar una renovación de contrato por cuatro temporadas a cambio de 200 millones de dólares (153 de ellos garantizados), cantidad que de manera automática lo colocaría como el de mayor paga en cuanto a promedio anual se refiere.
Rodgers es considerado uno de los mejores mariscales de campo y una vez que se retire apunta a convertirse en miembro del Salón de la Fama en gran parte por haber guiado a los Packers a la conquista del Super Bowl XLV, en febrero del 2011.
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En caso de que se concrete su extensión de contrato, el quarterback disputaría su decimoséptima temporada en Green Bay desde que apareció en 2005 como suplente de Brett Favre.
Antes de ser seleccionado por Green Bay en el Draft de la NFL de 2005, Rodgers jugó para la Universidad de California en Berkeley,
El año pasado Rodgers dejó entrever que la relación en los Packers estaba rota pues ya no se sentía cómodo en el equipo. Sin embargo, todo parece haberse superado e incluso la versión sobre un posible retiro se reservará para más adelante.
Para el equipo esta noticia resulta doblemente grata, ya que el nuevo contrato con Rodgers le permite reducir su tope salarial por más 27 millones de dólares y ello a su vez le brinda la posibilidad de retener a Davante Adams, jugador franquicia de la institución.
Cabe señalar que este año, la NFL estableció su tope salarial en 208.2 millones de dólares para cada uno de sus 32 equipos.
Actualmente, Patrick Mahomes, jugador de los Kansas City Chiefs, es el quarterback mejor pagado de la NFL, con un contrato de 450 millones de dólares a cambio de 10 temporadas, cantidad que representa un valor anual promedio de 45 millones.