Lionel Messi continúa navegando por la costa de Ibiza, pero durante un descenso que realizó a la playa para almorzar, fue abordado por decenas de fans que entre tumultos deseaban tomarse una selfie de recuerdo con el futbolista argentino.
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Lo cierto es que las vacaciones del jugador del París Saint-Germain con su familia y amigos están llegando a su final, así que para aprovechar el verano navega en un costoso yate que alquiló.
Acompañado de Luis Suárez y Cesc Fábregas, junto con sus respectivas familias se han dedicado a disfrutar de lo lindo su travesía por las islas baleares, aunque ocasionalmente son descubiertos por sus fans y ello les representa prácticamente salir huyendo.
Sin embargo, en todo momento Messi se muestra tranquilo y educadamente solo trata de abrirse paso entre la multitud para volver a la embarcación por la que paga 73 mil dólares a la semana.
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Así es como Messi y su séquito se consienten a sabiendas de que al argentino le aguardan nuevos retos en el ocaso de su carrera.
No obstante, la imagen de su visita a Formentera, la más pequeña de las Islas Baleares de España, quedará grabada en la mente del seleccionado albiceleste quien a sus 35 todavía sigue siendo foco de atención para los fans.