A sus 28 años, el austriaco David Alaba es toda una celebridad del fútbol luego de que durante una década como jugador del Bayern de Múnich formó parte de una generación que llenó de títulos las vitrinas del conjunto alemán.
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Esta exitosa trayectoria puso al defensor en la mira del Real Madrid, institución a la que arriba como refuerzo para encarar las próximas cinco temporadas a cambio de un salario anual estimado en 12 millones de euros.
Con su futuro en el fútbol prácticamente resuelto, Alaba ha decido cristalizar parte de los proyectos con los que siempre soñó, es el caso de “DaRose”, un lujoso restaurante propiedad del jugador austriaco que recientemente abrió sus puertas en Viena.
Con un menú donde se fusionan el sansón del Mediterráneo y de Singapur, András Sebestyén, chef húngaro contratado por Alaba, pretende seducir a los paladares más refinados de Austria.
Inaugurado hace apenas 10 días, el recinto gastronómico se ubica en el moderno campus de la Universidad Económica de Viena en el parque Prater.
Algunas de las personas que han visitado “DaRose”, cuya decoración combina la elegancia con la modernidad, señalan que la experiencia se apega al concepto con que fue creado: “Momentos para vivir, noches para recordar”.
De esta manera, David Alaba terminó por materializar un proyecto para darle gusto a sus padres Georg y Tina.
